Puede que Rihanna haya construido parte de su imperio al margen de la música gracias a su talento en el mundo de la moda y la belleza, pero eso no significa que en ocasiones no decida ponerse en manos de profesionales para que la maquillen y la vistan de cara a los eventos más importantes.
Uno de los afortunados que ha venido trabajando a menudo con ella es el maquillador Héctor Espinal, que tuvo la oportunidad de conocerla tras ganar un concurso organizado por la propia diva de Barbados.
«Las audiciones fueron sumamente intensas y duraron como casi seis meses», ha desvelado ahora el artista portorriqueño en una entrevista al programa ‘El Gordo y la Flaca’ de Univisión durante la que ha desvelado que consiguió imponerse en un proceso de selección en el que participaron más de cinco mil personas hasta llegar a la ronda final, donde la prueba definitiva era maquillar a la propia Rihanna.
«Llegué a la final y resulta que ella era la modelo, y no me dijeron nada. Entré en una habitación y vi a esa mujer que se me estaba acercando… y casi me da un infarto», ha recordado.
Al margen de su precisión con los pinceles y las brochas, las otras dos claves que le ayudaron a hacerse con un puesto de trabajo en la compañía Fenty fueron su personalidad y su trato cercano con la gente.
Por su parte, Rihanna le ha demostrado ser una jefa justa pero exigente que, a nivel personal, no permite que nadie le toque las cejas ni los labios.
«Es algo realmente impresionante porque es muy humilde y tiene mucho talento. Es un poco exigente, sí, pero eso es porque también se hace a menudo su maquillaje y lo disfruta mucho», ha desvelado.